Incursionando

De día me desprecia, me ignora.
Oscura va su mirada, observando
el lugar vacío que yo ocupo.

Pero de noche, cuando la luna
se desliza por el gris firmamento
y los secretos salen al recreo, ahí
mismo, justo allí aparezco, rodeada
de sombras de sueños.

Produzco escapes blancos, húmedo
su pensamiento. Tanto pierde al
ocultar.

Pero yo me escapo, siempre real
fantasía. Hasta que un día ya no
responda a su rojo llamado.

Si blanca es mi existencia, negro
será mi olvido. Y su llanto jamás
volverá a tener colores, pues me
los habré llevado conmigo.

Arrancamos así.

Bien. Empecé las clases en el profesorado. Segundo año de Historia. Tengo materias fabulosas y otras poco interesantes y/o inútiles.
Por empezar, la gloria: Historia del Arte. Cada vez me convenso más que quiero ser Lincenciada en Arte (también).
Materias interesantes: Roma y Grecias. Simplemente fabulosas. Las profesoras -por ahora, veremos el próximo cuatrimestre-, los temas, las cátedras en sí...
Materias fáciles: Psicología. Ya la hice antes...Dos veces. Pero ahora la veo con un enfoque más "adolecente". Muy entretenido. Yo sigo siendo adolecente, de hecho. Todavía vivo con mis progenitores...
Materias que no cortan ni pinchan, ni pincharán ni cortarán jamás: Antropogeografía y Geografía histórica. Cuando una materia tiene nombres así de rebuscados e "interdisiplinários" es porque es una mi-er-da. No me equivoco. Encima, para mí, Geografía física es peor que Matemática. Con eso digo todo.
Teoría de la Educación: Un sola palabra: ABURRIDA.
Historia Americana II: No me atrevo a hacer ningún análisis sobre esta materia. Ya veremos....
En fin. Un año que promete. Buenas y malas cosas.

Tengo una duda: ¿Dónde están las compañeras y los compañeros atractivamente interesantes que se supone que iba a tener?

Un misterio.

Crack it!

Por fin pude terminar ese dichoso capítulo. Ahora estoy en la fase de corrección y, mientras más leo, más inconforme e incomoda me siento. Y eso es algo que casi siempre me pasa cuando escribo fics.
Siento que no puedo ser original, que los escritos no me representan, porque tanto los personajes como los ambientes no me perteneces, son de otro…
Yo escribiría a mis personajes haciendo otras cosas, diciendo otras palabras, pero en el fiction me tengo que acoplar a la lógica del autor original y seguirla hasta las últimas consecuencias, sino, puedo cometer el terrible y censurable pecado de hacer OOC (Out Of Character).
El OOC es uno de los errores –horrores- más comunes que se cometen a la hora de hacer fiction y yo creo que ningun –o casi ningun- autor/a planea a adrede modificar la personalidad de sus amados personajes originales.
El problema, creo yo, deriva de la necesidad de plantear nuevas situaciones, nuevas tramas y aventuras. Pero, como éstas muchas veces no son compatibles con los personajes de tal o cual fandom, caemos repetidas veces en el error.
En muchas ocasiones me limité a escribir algunas ideas para ciertas historias porque tuve miedo de bastardear a los personajes.
Entonces, me surge la gran duda existencial que atormenta a muchas/os fikers: ¿Cómo podemos ser originales si el fandom nos limita tanto?
Vemos que, en este último tiempo, se está desarrollando asiduamente el género (no sé si llamarlo así) crack. Los autores cada vez más emparejan personajes imparejables y más lectores buscan encontrarse con estas joyas anárquicas del cannon.
Creo que esta táctica es una buena manera de sublimar la tensión acumulada de muchas de nosotras fikers compungidas. Podemos mantener la personalidad de los personajes y forzarlas hasta el extremo para que encajen con otras menos compatibles sin, necesariamente, crear un aberrante OOC. Aunque, como era de esperar, somos más vulnerables a cometerlo.
Sin embargo, personalmente me encanta el crack y hace tiempo dejé los prejuicios que me impone el santo cannon.
Quizás no sea todo lo original que quisiera ni pueda explotar este hobbie al máximo, pero cada día el fandom me da nuevas sorpresas y de eso se trata, justamente, el fanfiction.

Ansias

Ayer terminé de escribir un original para presentar en un concurso. No estoy segura de publicarlo acá también o no.
Por otra parte, tengo una deuda con las lectoras de mi Panrry –“Mucho ruido y demasiadas pocas nueces”-, que después del cuarto capítulo no sé por dónde irán los tiros en esa historia.
A todo eso le tengo que sumar la mala disposición a causa de un eclipse sentimental premenstrual.
Tengo tantas cosas en la cabeza que no sé por dónde empezar…
También quiero salir, ir a algún tugurio de mala muerte para escuchar música oscura hasta que mis oídos sangren. Pero hace demasiado calor en Buenos Aires y esos lugares, lamentablemente, no tienen aire acondicionado.
Si fuera creyente, ya estaría rezando rosarios tras rosarios para que este inmundo y copioso verano termine, para que mi presidentísima Kristina cambie el irreal horario (y que, de paso, deje de delirar y de decir que Obama imita a Perón...Por lo menos eso, Kris!), que marzo pase volando y que mi bisabuela pueda volver a la casa de mis tíos y deje de atosigarme con sus anécdotas recurrentes y cíclicas y de torturarme con su neurótica obsesión por el dinero y las posesiones. (Soy materialista, si, pero teórica- histórica, mierda-carajo!).
Pero, como soy atea lo único que puedo hacer es quejarme.
Así que, aquí estoy...Con ansias de quejarme.

Presentación

Después de mucho trabajo logístico para dejar este Blog presentable, espero ser lo suficientemente responsable para sentarme a escribir todo lo que tengo en la cabeza, que está ahí adentro rebotando contra las meninges y haciendo un ruido insoportable.

Entonces, ese es el fin último de este espacio: colgar esas historias originales -no originales-, alguno que otro fic y, si estoy de humor, opiniones personales... Ya que como sabemos, los blogs fueron creados por eruditos adeptos a fomentar una maravillosa y milenaria ciencia: la Opinología.